En sus narices. Si es que no tengo precio.
Veréis, no es Donser quien habla hoy, sino su mejor agente. Que está presente allá donde le llevan: me dejan en la misma habitación de la que se quiere sacar información y voilá, de repenete empiezan a hablar en cuanto llegan. ¡¡En mi cara!!
Yo descubrí, mientras me bebía casi un litro de agua, que aquél arzobispo no sólo era un pederasta, sino que también blanqueaba dinero de la Iglesia.
Estuve presente cuando se realizó uno de los ataques más salvajes contra el príncipe de Nueva Orleáns, allí, en un rincón del Club Crepúsculo.
Y es que tal como soy, es imposible que sospechen de mí. Con mis pintas… tan aseada, exuberante, tan… magnífica. Sí, qué queréis que os diga, nadie repara en mí. Soy la agente perfecta. Además Donser me cuida de lujo, dándome vitaminas cuando las necesita, sangre o agua, alimentos sólidos de vez en cuando.
Dentro de poco estaré de nuevo en marcha, esta vez en el Kremlin, como observadora en principio. Será duro, no me agrada ese clima, pero como estaré en un despacho bien atendida, no tendré mucho problema, o eso espero.
Firmado: Evarista, el Potho Ghoul de Donser.
Evarista Potho, Agente del Mes.
